lunes, 8 de septiembre de 2008

ALTO Y CLARO

Nos hemos acostumbrado a que todos los mensajes que salen de nosotros (en la ropa, en los complementos, en los objetos cotidianos...) a que todo lo que tengamos que decir en realidad lo digan otros en nuestro nombre. ¿Porqué no personalizamos nuestras pertenencias? al fin y al cabo son nuestras, las hemos pagado y son nuestras. ¿Porqué no aprovechamos cada soporte para contarle al mundo lo que tengamos que decirle?
Este ejemplo que muestro, además, surgió de una "necesidad" real.

jueves, 4 de septiembre de 2008

MALO MALO


La mayoría de los mensajes que nos lanzan son negativos. Entiendo que muchos funcionan como "advertencias" pero ¿no podríamos intercalar lo malo con lo bueno? Aquí va un ejemplo.

Mensajes que hablan de mí.

Mensajes que hablan de mí.